El dolor lumbar o lo que comúnmente se conoce como «ciática» o «lumbago» puede tener muchas causas y, a menudo, se debe a más de una. Algunas de las causas más comunes son descompensación, sobrecarga o insuficiencia de la musculatura de la espalda, la hernia de disco, la enfermedad degenerativa del disco, mala alineación de la columna incluyendo escoliosis, fracturas por compresión osteoporótica, traumatismos, infección. ¿Y realmente necesitas una resonancia magnética? No siempre. Entonces, ¿qué pruebas de imagen te debes hacer en la lumbalgia o ciática?. Hoy os explicamos las diferencias entre las 3 pruebas de imagen más solicitadas por los cirujanos de columna que son la radiografía, la resonancia y el tac :


Las radiografías dan idea de la forma de la columna vertebral. Son la mejor prueba de imagen para evaluar la alineación y las deformidades de la columna vertebral. Debe ser el primer examen utilizado para evaluar la columna. Son más útiles cuando se realizan en carga, es decir con el paciente de pie, pero a veces las realizamos en flexión (hacia delante), en extensión (hacia atrás), tumbados boca arriba (decúbito supino) o boca abajo (decúbito prono) para comprobar la estabilidad de la columna. La radiología no es dolorosa pero la irradiación con Rayos X es nociva, por lo que conviene limitar su uso a los casos en los que está realmente justificado. El RCGP señala que una radiografía de la columna lumbar conlleva una irradiación 150 veces superior a una radiografía de tórax.


La Resonancia Magnética es excelente para el estudio de las partes blandas. Detecta la hernia discal, la estenosis de canal, las lesiones de los nervios o de la médula, los tumores y las fracturas. La resonancia no expone al paciente a ningún tipo de irradiación peligrosa ni es dolorosa. Requiere, sin embargo, que el paciente esté quieto durante unos 15 minutos en un espacio pequeño, por lo que puede ser desagradable para los que sean ansiosos o tengan tendencia a la claustrofobia. No obstante, hay estudios que han demostrado que la resonancia magnética (RM) no es tan fiable como se consideraba en el diagnóstico de las dolencias de espalda: la misma imagen era interpretada de manera distinta por médicos diferentes, o incluso por el mismo médico en momentos diferentes. Otros estudios han demostrado que en una resonancia magnética lumbar, hasta el 30% de las personas sanas y sin dolor muestran hernias discales, y el 70% protrusiones, y que a partir de aproximadamente los 40 años prácticamente todos los sujetos sanos muestran signos de degeneración ósea y discal. Y en la columna cervical, los hallazgos son similares: el 87,6% de los sanos sin dolor presentan protrusiones discales; ya a los 20 años, los presentan el 73,3% de los hombres y el 78% de las mujeres, y la frecuencia, tamaño y número de protrusiones aumenta con la edad. No se ha demostrado que existan diferencias en los hallazgos cervicales entre pacientes con dolor cervical y personas asintomáticas, por lo que el significado clínico de las imágenes y su utilidad diagnostica no están demostradas. La RM debe realizarse en los casos en los que ha demostrado ser fiable, evitamos así realizar diagnósticos erróneos, tratamientos inadecuados e innecesarios.


La Tomografía Computarizada o escáner es muy útil para analizar la alineación de la columna y para estudiar el hueso, sobre todo cuando el paciente ha tenido un traumatismo de la columna vertebral. El escáner permite ver el hueso mejor que la resonancia magnética. Es el mejor examen para evaluar cómo se está formando el hueso (artrodesis) después de la cirugía de la columna vertebral. El escáner no es doloroso pero tampoco inocuo; expone al paciente a una irradiación considerable, equivalente a la de varias radiografías a la vez.
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¿Qué pruebas de imagen te debes hacer en la lumbalgia o ciática? No podemos olvidar que las primeras y más importantes fuentes de información para conocer las causas del dolor de espalda son la historia clínica y la exploración física del paciente, las pruebas de imagen sólo tendrán valor si sus resultados se corresponden con los de la exploración física.

¡La mayoría de los dolores de espalda no son quirúrgicos!

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